Los hijos de las víctimas de la violencia machista sufren trastornos psicológicos graves

El número de trastornos psicológicos detectado en los hijos de las víctimas de la violencia de género "es alto y significativo" en la Región de Murcia. Así lo ha señalado la presidenta de la Asociación Quiero Crecer,Concha López Soler, en el balance del trabajo desarrollado por este colectivo durante los últimos diez años. Esta entidad, creada en 2008 para dar tratamiento psicológico específico a los hijos de la violencia intrafamiliar, también ha investigado las condiciones de salud mental de los menores expuestos en ambientes de violencia.

"Los trastornos que presentan estos niños son graves", ha sostenido la presidenta, que ha citado algunas de estas patologías: el estrés postraumático, determinados trastornos depresivos graves y el trauma complejo, "que es un tipo de reacción postraumática que desconfigura la capacidad del niño o de la niña para poder funcionar de una manera autónoma", ha detallado López Soler.

"No se trata sólo de menores en situación de riesgo psicosocial, sino que son menores que necesitan una atención sanitaria puesto que siguen sometidos a una situación de alto estrés, que aumenta su vulnerabilidad", ha advertido en la rueda de prensa. La presidenta de Quiero Crecer ha intervenido acompañada por la directora general de Mujer e Igualdad de Oportunidades, Alicia Barquero. "Son menores faltos de estabilidad emocional y familiar, con problemas de conductas", ha apuntado la presidenta de Quiero Crecer.

La asociación cumple diez años precisamente en la semana en la que se celebra el Día Mundial de la Infancia (20 de noviembre) y el Día Internacional contra la Violencia de Género (25 de noviembre): "Son dos citas que tienen mucho que ver con la labor que desarrollamos desde la Asociación Quiero Crecer", ha añadido la presidenta, cuya asociación trabaja por el bienestar psicológico de los menores y por una infancia libre de maltrato.

Este grupo de profesionales (formado por una docena de psicólogos e investigadores e implantado en quince municipios de la Región), ha atendido a más de 1.500 menores. De todos ellos, 1.137 son niños expuestos a la violencia de género, una cifra que supera los 1.200 en los casos de violencia intrafamiliar. El número de menores aumenta cada año, ha agregado Concha López.

Una unidad pionera

Se trata de una unidad que fue pionera en España, ya que hasta 2009 los programas de atención psicológica sólo se centraban en las víctimas, ha explicado Alicia Barquero. La asociación trabaja en tres áreas: menores expuestos a violencia de género (un servicio financiado por la Consejería de Familia), el programa de equinoterapia en infancia maltratada (que atiende a 79 niños desde 2015) y el servicio de atención psicológica en infancia y adolescencia (267 jóvenes atendidos).

¿El objetivo? "Disminuir los problemas psicológicos de los menores al tiempo que aportamos experiencias enriquecedoras y terapéuticas", ha indicado la presidenta de Quiero Crecer, quien ha destacado la puesta en marcha de programas novedosos, como la incorporación de terapias asistidas con caballos. "Todos los tratamientos están basados en estudios científicos que demuetran su eficacia: mejoran la autoestima de los menores, las habilidades sociales, su autorregulación y la resolución de problemas".